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Cómo hacer un TFG: guía definitiva

Todos los que pasan por una universidad acaban antes o después haciéndose esta pregunta: cómo hacer un TFG. Y es que, el Trabajo de Fin de Grado (TFG) representa no solo una de las etapas más importantes en la vida académica de cualquier estudiante universitario, sino que es además el último peldaño después de años de estudio y esfuerzo.

Y, para que puedas demostrar todo lo que has aprendido en la carrera, en esta guía definitiva te proporcionaremos una visión detallada de cómo hacer un TFG, desde la elección del tema hasta la defensa final.

La guía académica de tu carrera y universidad

Lo primero de todo, antes incluso de aprender a cómo hacer el índice de un TFG, debes saber que como con cualquier asignatura, tu universidad facilita una guía detallada que contiene las pautas e indicaciones que debes seguir para hacer bien tu TFG.

Te recomendamos leer en detalle este documento y tener siempre a mano una copia para resolver las dudas que te puedan ir surgiendo. Familiarizarte con esta guía puede ser determinante para el resultado de tu Trabajo de Fin de Grado.

Elegir el tema del TFG

La elección del tema del TFG podría considerarse el punto de partida y puede marcar la diferencia tanto en la dificultad de desarrollo como en los resultados. Echa un vistazo a estos consejos para que elijas bien:

  1. Pasión y motivación: optar por un tema que realmente te apasione hará que todo el proceso sea más llevadero y motivador. Piensa en las asignaturas que más te han gustado durante tus años de estudio, ya que trabajar en algo que te apasiona aumentará tu motivación.
  2. Relevancia e impacto: asegúrate de que el tema que elijas tenga relevancia social, cultural, científica o académica. Un buen TFG debería contribuir de alguna manera al conocimiento existente o abordar un problema actual.
  3. Especificidad: evita seleccionar temas demasiado amplios. Cuanto más específico sea tu enfoque, y cuanto más definido esté el alcance de tu TFG, más fácil te resultará realizar una investigación en profundidad y resultados más sólidos.
  4. Viabilidad y acceso a recursos: antes de decidirte por un tema, considera si es viable desarrollarlo. Esto significa evaluar si tienes acceso a las metodologías de investigación necesarias y si cuentas con las habilidades académicas y recursos necesarios.
  5. Asesoramiento y opiniones: busca el consejo de tu tutor y del resto de profesores de tu universidad. Sus perspectivas y orientación pueden ayudarte a matizar y definir correctamente la elección de tu tema.

Seleccionar el tipo de investigación

Una vez sepas cómo elegir el tema del TFG, es importante definir el tipo de investigación que llevarás a cabo. Existen varios tipos de TFG, y tu elección dependerá de tu nivel de estudios, la metodología que planees utilizar y los objetivos de tu proyecto. Aquí se presentan los tipos comunes de TFG:

  1. Según el nivel de estudios: asegúrate de que el tipo de investigación que te propones realizar se corresponda con tu nivel académico.
  2. Según la metodología: considera si llevarás a cabo investigaciones de campo, investigaciones documentales o una combinación de ambas.
  3. Tratamiento de la información: define el enfoque que utilizarás para presentar tus hallazgos. Esto puede incluir investigaciones narrativas, expositivas, transcriptivas o de catálogo.
  4. Enfoque de la investigación: evalúa si tu TFG será de naturaleza cualitativa, cuantitativa o una combinación de ambos (investigación mixta). Esta elección dependerá de tus objetivos y de la naturaleza de los datos que recopiles.
  5. Objetivo del proyecto: considera si tu investigación tendrá un enfoque descriptivo, explicativo, documental, experimental, interpretativo, exploratorio o confrontativo, según la naturaleza de los hechos que estás estudiando.

Estructura y contenido del TFG

Una vez que hayas definido el tipo de investigación que realizarás, es hora de establecer la estructura y el contenido de tu TFG. Un TFG típico consta de varias secciones clave que debes desarrollar cuidadosamente:

  1. Sección inicial o preliminar: esta sección abarca la portada, que incluye información como el nombre de la universidad, la facultad, el título del TFG y los nombres de los autores, tutores y cotutores. Además, dedicatorias, agradecimientos, un índice de contenido, un resumen y una introducción. En este apartado te puede interesar aprender cómo hacer una introducción de un TFG y cómo hacer el resumen de un TFG.
  2. Hipótesis: en esta parte, debes plantear, contextualizar y justificar claramente el problema que abordarás en tu TFG. Es fundamental definir los objetivos de tu investigación, por lo que no estaría de más aprender a cómo hacer la justificación de un TFG.
  3. Marco teórico: en este apartado, presentarás la información teórica y conceptual relevante que está relacionada con tu tema de investigación. Debes definir conceptos y teorías clave y hacer referencia a trabajos previos que sirvan como base para tu estudio. Es uno de los puntos más críticos de un buen Trabajo de Fin de Grado, por lo que no dudes en aprender a cómo hacer el marco teórico de un TFG correctamente.
  4. Marco metodológico: aquí describirás la metodología que emplearás en tu investigación, incluyendo la modalidad, los métodos de obtención de datos y el análisis de los mismos. Además, es necesario especificar la población y la muestra si corresponde, algo que puedes leer en detalle en cómo hacer la metodología de un TFG.
  5. Resultados: tras haber recopilado y analizado datos, es el momento de presentar los resultados de tu investigación. A menudo, es útil utilizar tablas, gráficos y diagramas para facilitar la comprensión de la información. En este apartado puede resultar muy útil aprender a cómo hacer la discusión de un TFG.
  6. Discusión:  no todos los Trabajos de Fin de Grado incorporan la sección de discusión. Sin embargo, si tu TFG cuenta con este apartado, se destaca como la sección donde se analizan los resultados en relación con la hipótesis y los objetivos previamente establecidos. Aquí, se proporcionan interpretaciones detalladas y se deducen conclusiones basadas en los hallazgos obtenidos.
  7. Conclusiones: en esta parte, presentarás los hallazgos más significativos de tu TFG, resaltarás las observaciones clave y ofrecerás recomendaciones para futuras investigaciones o aplicaciones prácticas. Si tienes dudas con este apartado, no dudes en aprender cómo hacer las conclusiones de un TFG.
  8. Referencias bibliográficas y anexos: esta sección es fundamental para respaldar tus argumentos y aportar credibilidad a tu TFG. Enumera los documentos y recursos que utilizaste siguiendo una normativa de citación específica, como APA 7. Los anexos pueden incluir herramientas que empleaste en la recolección de datos, imágenes relevantes y documentación adicional. En este apartado, puede interesarte aprender en detalle a cómo hacer la bibliografía de un TFG.

Escribir el TFG correctamente

Después de estructurar tu TFG y definir el contenido de cada sección, es hora de abordar la redacción del documento. Aquí hay algunos consejos para escribir un TFG de calidad:

  1. Planificación: antes de comenzar la redacción, crea un plan detallado que incluya un esquema de tu TFG. Esto te ayudará a mantener un enfoque claro y una estructura coherente.
  2. Revisión de la literatura: antes de redactar tu marco teórico, investiga y revisa la literatura existente sobre tu tema. Gracias a ello tendrás una visión global y podrás estructurar adecuadamente tu marco teórico. Asegúrate de citar y referenciar correctamente todas las fuentes que consultes.
  1. Redacción cuidadosa: utiliza un lenguaje técnico o científico apropiado para tu campo de estudio. Presta especial atención a la gramática y la ortografía, ya que la precisión es esencial en la investigación académica.
  2. Coherencia y cohesión: mantén una estructura lógica y asegúrate de que cada sección fluya naturalmente hacia la siguiente. Utiliza conectores y párrafos de transición para guiar al lector a lo largo de tu TFG.
  3. Citas y referencias: asegúrate de citar correctamente tu TFG todas las fuentes que utilices en tu trabajo. Utiliza el formato de citación requerido por tu universidad, que generalmente sigue normativas como APA 7, MLA o Chicago. Si no lo haces correctamente, te arriesgas a que un detector de plagio de TFG haga que te penalicen por ello.
  4. Revisión continua: revisa y edita tu TFG de forma regular. Puedes buscar la ayuda de tutores, amigos o compañeros de clase para obtener una evaluación objetiva de tus avances.

Cómo revisar correctamente tu TFG

Una vez redactado tu primer borrador del Trabajo de Fin de Grado (TFG), debes asegurarte de realizar una revisión completa del mismo. Algunos consejos de utilidad son:

  1. Realiza una revisión minuciosa para detectar ambigüedades, muletillas, jergas, expresiones poco profesionales o cualquier contenido de doble sentido en tu texto.
  2. Asegúrate de que la redacción cumpla con estándares impecables de ortografía y gramática. En caso de duda, puedes hacer uso de herramientas en línea diseñadas para esta finalidad, aunque se recomienda encarecidamente una corrección de texto realizada por un ser humano para resultados óptimos.
  3. Verifica que todas las referencias y fuentes bibliográficas estén citadas correctamente a lo largo de tu trabajo, de acuerdo con la metodología de citación que estás utilizando.
  4. Examina el ritmo de lectura de tu TFG, prestando especial atención a signos de puntuación y comas, entre otros detalles.
  5. Invita a un amigo o familiar a leer tu borrador para evaluar su legibilidad y comprobar si comprenden claramente tus ideas.

Defensa del TFG

La culminación de tu TFG implica su defensa ante un jurado académico. Durante esta presentación, debes resumir los aspectos más destacados de tu investigación de manera profesional y respetuosa. Aquí te dejamos algunas pautas para que tu defensa del TFG sea todo un éxito:

  1. Preparación: ensaya tu presentación antes de la defensa y conoce tus resultados y conclusiones a la perfección. Estar preparado te dará confianza para el gran momento.
  2. Estructura de la presentación: define una estructura clara para tu presentación, que incluya la introducción, el problema, el marco teórico, la metodología, los resultados y las conclusiones. No te olvides de las recomendaciones finales.
  3. Claridad y concisión: comunica tus ideas de manera clara y concisa. Evita tecnicismos innecesarios y asegúrate de que el jurado pueda seguir tu argumento de principio a fin.
  4. Preguntas y respuestas: prepárate para las preguntas del jurado. Considera posibles preguntas que puedan hacerte y prepárate para responderlas de manera fundada.

Respeto y profesionalismo: mantén una actitud respetuosa y profesional durante la defensa. Escucha atentamente las observaciones del jurado y responde con cortesía.

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